16/10/11

Holy Shit!!! Digo... Apple!

"... Pero nuevamente Jesús dio un fuerte grito y entregó su espíritu. En ese mismo instante la cortina del Santuario se rasgó de arriba abajo, en dos partes. La tierra tembló, las rocas se partieron, los sepulcros se abrieron y..."

San Mateo featuring Steve Jobs.


Sé, sé, os jodéis. No seré yo defensor de la Biblia y otros derivados "espirituosos" pero la historia se repite, una vez más. Con toda la parafernalia de estrella del rock incluída, aunque tengo que reconocer que me impresiona más un trailer del apocalipsis que un tsunami de tweets, facememeces y velitas. Como dicen los abuelos "las cosas antes se hacían para durar".

Steve Jobs, este "personal Jesus" de los últimos años, ha pasado de levitar a un palmo del suelo a estar 5 metros bajo él. C'est la vie. Ahora, legiones de microbios lloran la grandísima pérdida que supone en sus vidas... Y es que ha muerto el Salvador opuesto al Demonio, ese ricachón hijo de mil padres llamado William Henry Gates III, Bill Gates para los amigos. Dos formas totalmente diferentes de interpretar la vida, ¿o no?


Jobs ese visionario budista que escapó a la India para reencontrarse con él mismo, el defensor del "Think Different"... Ese grandísimo hombre cuyo legado perdurará más allá del tiempo y del espacio...



Lo siento, lo intento pero no puedo. Soy un pésimo actor y muchísimo menos puedo afrontar un reto tipo "RainMan" o "Yo soy Sam"... Seré un tullido emocional pero no uno mental.



Steve Jobs fue un sensacional empresario pero, por encima de todo, un charlatán. Un charlatán feng-shui postmoderno. Y, como todos los de su especie, basó su prosperidad en la estupidez ajena... El recurso energético más numeroso y productivo en nuestro planeta, totalmente respetuoso con la capa de ozono además.
Apple, a través de una cojonuda campaña publicitaria, consiguió convencer a propios y extraños de que representaban ese ideal guay-reformista-revolucionario con el que muchísimos mojan la cama... "Think Different", te decían mientras comprabas software cerrado incompatible con el 99% de los productos en venta. Porque claro, Billy Gates era poco menos que Satanás con úlcera al asegurarse de que todo PC viviente funcionase con Windows, pero Jobs podía cobrarte 300€ por un Ipod y seguir siendo Dios sobre la tierra. O venderte un ordenador con prestaciones mediocres a precio de superdeportivo.

"El 99% de los diseñadores gráficos usan Mac", me dijo una vez un conocido. Con la materia prima hemos topado, Sancho. Pero prima prima. Debo de ser el único ser del planeta que iguala la autoridad de un "Diseñador gráfico" a la de un "Psicoanalista argentino". Y es que Jobs supo como nadie subirse al carro de lo Guay, creando escuela y lavando cerebros por el camino.



En fin. Ha muerto Jobs, el que "pensaba diferente" con el 7% de Disney y un patrimonio de 7mil millones de dólares amaricones. Mientras tanto Satán nos acompaña en la tierra, William Henry Gates III seguirá comprando almas a cambio de antivirus... Y donando 23mil millones de dólares a su Fundación, Premio Príncipe de Asturias por la Cooperación internacional. 200 millones de dólares para prevenir el Sida en la India. Jobs se preparaba a tiempo parcial para su próxima reencarnación, no había lugar para estas distracciones.




Y es que ni Apple es tan bueno ni Microsoft tan malo... Básicamente porque son lo mismo: empresas.